Una cascada de agua transparente y tibia cae sobre tu espalda, una sensación de increíble placer y paz recorre todo tu cuerpo y el momento se detiene, rodeado de una plenitud indescriptible.
Dejas de percibir tu cuerpo, olvidas tu materia y sólo sientes tu ser, flotas y te expandes, viajas a los lugares más hermosos jamás imaginados con el poder de tu mente, creas mundos llenos de luz, con colores de una intensidad nunca vistos antes por tus ojos físicos.
Una cascada de agua transparente y tibia cae sobre tu espalda, una sensación de increíble placer y paz recorre todo tu cuerpo y el momento se detiene, rodeado de una plenitud indescriptible.
Dejas de percibir tu cuerpo, olvidas tu materia y sólo sientes tu ser, flotas y te expandes, viajas a los lugares más hermosos jamás imaginados con el poder de tu mente, creas mundos llenos de luz, con colores de una intensidad nunca vistos antes por tus ojos físicos.
Vuelas por encima del mar y montañas, aves exóticas y multicolor pasan a tu lado y sientes su amor hacia ti, una inmensidad infinita te rodea, sigues viajando en tu mente por que algo te empuja hacia adelante, y te alejas más y más de tu materia.
Ahora sólo sientes, sabes que es tú imaginación la que está creando ese mundo , y que en cualquier momento puedes despertar.
Te sigues elevando, fluyendo, emanado amor y sintiéndote pletórico como nunca jamás antes lo habías sentido.
Y una voz dulce te susurra..., ahora es el momento de crear, tus deseos son ordenes, pide y se te dará.
Sigues volando, el mar es tan azul, tan infinito y tan bello que la emoción te recorre como un escalofrío, una energía brutal que es capaz de crear mundos para ti, aquí y ahora.
Sigues las indicaciones de la voz y tus deseos empiezan a fluir uno por uno, a lo lejos ves la casa de tus sueños, es increíble estas dentro y es tuya.
Te gusta, ¿verdad? Tu la has pedido y tuya es, pero no pares aquí y continua hay mucho más esperándote.
Continuas tu viaje, tu vuelo alto y libre, y ves un grupo de personas, te acercas y ahí están tu familia y amigos, te quieren y les quieres tal y como son. Anhelas abrazarlos y quedarte con ellos, pero la voz te vuelve a llamar, y esta vez te aleja a una velocidad extrema.
Siempre te ha gustado el mar, quizá por eso, el agua esté todo el tiempo en este sueño, de niño soñabas con navegar, y vivir junto al mar... Escuchas de nuevo la voz que te dice, tus deseos son ordenes, pide y se te dará.
Y lo deseas de nuevo y lo ves, un precioso barquito con tu nombre en la popa, esto es demasiado, no te ves, no te notas, y sin embargo sientes más y mejor que nunca, que todos tus deseos son una realidad y que estas en ellos disfrutándolos como nunca antes podías haberlo imaginado.
Este sueño recurrente, dejará de ser un sueño para convertirse en una realidad.
Nuestros deseos se forjan en la mente y nuestra increíble imaginación humana, los define y los crea, pero sólo el sentimiento de vivirlos como una realidad, harán que el universo orqueste las circunstancias, personas y eventos necesarios para que lleguen hasta ti.
Pon deliberadamente tu deseo en la mente antes de dormirte, el sueño creará tu realidad y al despertar lo sentirás como tuyo.
Normalmente, al despertar, ese estado te dura unos segundos, y rápidamente vuelves al mundo físico y a los problemas cotidianos que te hacen olvidar el sueño.
La clave está en mantener la emoción, el sentimiento del sueño durante el día, a pesar de que tu realidad no se corresponda con esa emoción, no la pierdas, aférrate a ella e interiorizala.
Mantén ese sentimiento de plenitud anclado en ti, pase lo que pase en tu realidad cotidiana, si mantienes tu sentimiento, tu sueño acabará por encontrarte.
Tu libertad no está sólo en lo que decides hacer, antes está en lo que eliges pensar y sentir.
Es tu mente la creadora, si perpetúas el sentimiento de lo que deseas. Ahí reside tu auténtica libertad, y lo que te hará vivir una vida plena y feliz.